Época medieval

Disponemos actualmente la lista de chantres desde 1206, no así la de los maestros de capilla, ya que su figura va unida al nacimiento de la polifonía y no aparece clara hasta el s. XV. En 1436 el navarro José de Anchorena, que había estudiado en Salamanca, era el "maestro mayor de los cantorcicos", mientras aparece como "chantre" Martín de Abárzuza, lo que indica que se van separando los cometidos de uno y otro cargo. Anchorena pasó a la Catedral de Burgos en 1438. Juan Sánchez de Escós aparece en 1497 como "maestro de músicos de Pamplona", y en 1483 figura como músico de la Seo de Burgos.

Siglo XVI

De la lista de los diversos maestros de capilla del siglo XVI solo podemos ofrecer las fechas iniciales de su nombramiento: Juan Úriz (1521), Juan Arteche de Legaria (1542), Pedro de las Montañas (1556), Fortuño Ibáñez de Salazar (1568), un maestro de quien se omite el nombre y por quien cobra fray Pedro de Vera (1576 y siguientes), Miguel Navarro (158O), Esteban de Alvarez (159O) y Juan de Aldaba (1597), con el que finaliza el siglo.

Siglo XVII

A lo largo del s. XVII se sucedieron diez maestros: Juan de Aldaba (1593-1616), Miguel Navarro, que al parecer simultaneó el cargo con Aldaba desde 16O8 y fue maestro en exclusiva desde l6l6 hasta l627en que murió, Mateo Calvete (1627-1628), Urbán de Vargas (1629-1637), Pedro Jerónimo de Labeaga (1637-1655), Bernardo de Ubidía (1655-1658), Pedro de Ardanaz (1658-1674), Gabriel de Sostre y Sola (1675-1691), José de Cáseda y Villamayor (1691-1695) y Fray Sebastián de Urrutia (1695-17O3).

Siglo XVIII

En total son cinco los maestros de capilla que sirvieron la Seo. Sebastián de Urrutia (1695-1703), Miguel Valls (1704-38), Andrés de Escaregui (1738-73), Juan Antonio Múgica (1773-1779) y Francisco de la Huerta (1780-1814). Es el siglo en que sus maestros han dejado más obras en el Archivo Histórico de la Catedral.

Siglo XIX

A pesar de la cercanía de las fechas, la relación de los maestros es incompleta. Es un siglo de continuas agitaciones bélicas. Pamplona estuvo sitiada por los franceses, siendo liberada en 1813, y las dificultades de abastecimiento de los “infantes” obligan a estos a tener que salir a comer con sus familias. El Trienio Constitucional de 1820 trajo una nueva crisis a Pamplona, y los “Cien mil hijos de San Luis” sitiaron la ciudad durante seis meses. Luego vendrían las guerras carlistas y la Desamortización de Mendizábal (1836). A pesar de ello, se anota en 1845 con ocasión de la visita a la Catedral de Isabel II que la Capilla “desempeñó su papel con primor”.

El Concordato de 1851 redujo las capillas catedralicias españolas de una manera drástica. En 1860 vuelve a cambiar el status jurídico del Cabildo de “regular” a “secular” (lo contrario de lo que había sucedido hacia el año 1084). Subsisten la figura del maestro de capilla, organista y sochantres, y se reduce el sueldo de otros músicos a la mitad. Se introducen cantores e instrumentistas seglares que van a asumir en la práctica el papel de maestros de capilla. Así, Julián Prieto (1765-1844), tenor de la Capilla de Música, hace de maestro y compositor hasta el año de su muerte, Mariano García Zalba (1809-1869), bajón-figle, es de hecho el compositor oficial de la Catedral, hasta que en 1876 asume el magisterio el sacerdote beneficiado Hipólito Ramírez, quien se dedica a introducir con entusiasmo la obra de H. Eslava en la Seo.

En definitiva la lista de maestros de capilla es ésta: Francisco de la Huerta (+ 1814), Julian Prieto (tenor-mtro. de capilla) fallecido en 1844. En 1831 es sustituido en sus funciones por el organista Damián Sanz, quien en 1850 consiguió la plaza de organista de la Primada de Toledo. Al año siguiente vuelve a Pamplona por problemas de salud en Toledo y se le asigna la plaza de organista primero y maestro interino. En 1876 pasa a Burgo de Osma, muere en 1878. Esta época de tenores y organistas en funciones de maestro de capilla se anota su labor en las Actas con la frase "los tenores gobiernan el canto echando el compás". En 1876 se convocan oposiciones y es nombrado Hipólito Ramírez, quien continúa hasta su muerte (1901).

Siglo XX (XXI)

Se inicia el siglo con el citado Hipólito Ramírez y Larraz, quien muere en l90l. Le siguen: Gaspar Besga y Oyarzun (1901-l902), Daniel Piudo Zubiri en (l903-l9l8), Antonio Pérez Sáinz (1918), pero en l926 cesa en el cargo, que pasa a Jesús Rotellar Ucar. (1926-1938). A. Pérez muere en l955. Leocadio Hernández Ascunce (1938) queda exonerado en l944 de las cargas del magisterio, habiendo muerto en 1965. Sigue un breve período, en el que José Mª Ariz Elcarte en l953 oposita y obtiene el beneficio de maestro de capilla y organista 21, pero al poco tiempo también es exonerado del cargo por razones de salud. Es sustituido en precario por el organista Pío Iraizoz y por el Salmista-sochantre Martín Lipúzcoa. Aurelio Sagaseta accede al cargo por oposición en 1961 y continúa en el mismo hasta 2023, siendo el maestro de capilla titular que más años ha ejercido como tal en la Catedral de Pamplona (24-01-1962/24-01-2023).

En 2010 se unió estatutariamente el Oficio de maestro de capilla al de chantre (“chantre-maestro de capilla”), volviendo la función musical de este cargo a sus orígenes, cuando se creó la chantría (1206) para la dirección musical de la Seo. A partir del s. XV la chantría pasó a ser “dignidad” (jefe musical sin ser músico) y las obligaciones musicales fueron asumidas por el maestro de capilla (polifonía) y por el sochantre (canto llano). Este reparto de las funciones de los “oficios musicales” ha perdurado así hasta nuestros días, siendo el último titular de canto llano Heradio Villanueva (+ 2006). De momento la función de sochantre ha pasado de facto al maestro de capilla...

En enero de 2023 accede al puesto Ricardo Zoco Lampreabe, antiguo componente del coro y director invitado en ocasiones. Aurelio Sagaseta pasa a ser maestro de capilla jubilado y encargado del Archivo de Música de la Catedral.